BCCCAP00000000000000000000858

454 LÁZARO DE ASPURZ de la provincia pidiendo voluntarios para el nuevo seminario. Al año siguiente se hacían a la vela dos expediciones que integraron la comu– nidad misionera. En 1788 constaba de 30 sacerdotes y 11 hermanos. En 1791 el rey pedía aún 20 más. En 1793 fue promulgado el « Regla– mento y Ordenaciones para el Seminario de Misiones de La Habana » por el provincial y los definidores 48 • Finalmente, también la provincia de Andalucía tuvo su semina– rio de misioneros, el único establecido en la metrópoli con una orien– tación estrictamente misionera: el de Sanlúcar de Barrameda. Desde 1764 existía en esta población un seminario de misioneros, fundado por el P. Colindres, al estilo de los establecidos por este general; ignoramos si el « Nuevo Real Seminario de educación e instrucción de misioneros para Indias, erigido, establecido y fundado » por de– creto del provincial, P. Jerónimo José de Cabra, el 29 de diciembre de 1796 4 9, fue una mera transformación del anterior o institución diferente. Las circunstancias históricas en que nació no permitirían augurarle larga vida 50 • 48 Cf. Catálogo del Libro Misional Español, en España Misionera 3(1946) 350, 417. <9 Una nueva edición de este decreto fue hecha en Madrid en 1796. Existen ejemplares en Archivo Gen. de Indias y en la Biblioteca de la Universidad de Sevilla. Cf. R. STREIT, Bibliotheca Missionum I, 551s; España Misionera 3(1946) 350. so Cf. AMBROSIO DE VALENCINA, O.F.M.Cap., Reseña histórica de la Provincia Capuchina de Andalucía II, Sevilla 1906, 253.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz