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JAIME DE CORELLA ESCRITOR MORALISTA 367 Por su parte las Conferencias morales se ordenan más bien a la preparación remota del confesor, procurando su debida formación en la ciencia moral. « Y en este libro se da el medio más útil y necesario, dando reglas y principios generales para que los que estudian la teología moral con facilidad la aprendan y con fundamento la sepan » 76 • Esta finalidad condiciona la orientación y estructura de la obra, que el P. Jaime adapta a las conferencias morales, que debía celebrar pe– riódicamente el clero, en orden a prepararse para el ministerio de la confesión. La ocasión próxima que motivó sus Conferencias morales nos la cuenta el mismo autor 77 • El obispo de Pamplona D. Andrés Girón 78 pretendió arrogarse el derecho de examinar a su arbitrio a los sa– cerdotes de su diócesis, aun después de haber sido aprobados para oir confesiones. Se opuso a ello unánimemente todo el clero, en tér– minos que se inició un proceso judicial. El capuchino P. Domingo de Pamplona escribió con este motivo un erudito alegato a favor del clero 79 • El pleito siguió un largo curso sin que se llegara a ninguna solución, hasta que el mencionado D. Andrés Girón fue promovido al arzobispado de Santiago. Su sucesor en la diócesis de Pamplona Fr. Pedro Roque, O.F.M.Obs., « príncipe benignísimo y amigo en todo de la paz » 80 , llegó por medios pacíficos a un acuerdo, confirmado luego por Clemente X en el breve « Redemptoris et Domini nostri » del 14 de mayo de 1672 81 • El clero quedaba eximido de la obligación de los exámenes, pero, en cambio, debían instituirse en cada arci– prestazgo las conferencias morales. A ellas debían asistir, al menos dos veces por mes, todos los sacerdotes con cargo de almas, « ac ibidem de casibus iis, qui praefatorum Sacramentorum adminis– trationem concernunt inter se disputare et tractare debeant » 82 • Las conferencias morales entre el clero, conservadas aún hoy en 76 Conferencias morales I, ed. Valencia 1691, Aprobación del M.R.P. Francisco de España. 11 Cf. Conferencias morales I, 1-3. 78 Fue obispo de Pamplona desde 1664 hasta 1670, en que fue trasladado a Santiago de Compostela (cf. C. EUBEL - P. GAUCHAT, Hierarchia catholica medii et recentioris aevi IV, Monasterii 1935, 272; V, Patavii 1952, 304). 70 Cf. MARTÍN DE TORRECILLA, Consultas, alegatos, apologías y otros tratados así regulares como de otras materias morales II, Madrid 1702, 133-174, donde se refiere este alegato. so Conferencias morales I, l. Gobernó la diócesis de Pamplona desde 1670 a 1683 (cf. Hierarchia catholica cit. V, 304). 81 Cf. Conferencias morales I, 2-3. El documento no ha sido recogido en las colecciones oficiales. 8 2 lbid., 2.