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1:;¡ CORRESPONDENCIA DE LA M. ANGELES CON EL P. MARIANO 2.-El adjunto papel, parte de su últi111a dirigida desde Bilbao (1), y que ha sido como el talento con que compró mi confianza y la llave que le franqueó las puertas de mi co,razón, remito a V. R. tal como íe traje conmigo desde que lo leí, para que tenga la bondad de cam– biarme por otras llaves más fuertes, pero mucho más fuertes, que me hacen falta, mejor dicho, hacen falta a V. R., para abrir los cerrojos de tantas .puertas como están todavía por abrir en mi cora– zón, donde existen muchos senos ocultos, qm~ es necesario sean des– cubiertos por V. R., si. es que quiere arrojar de él in virga ferrea a todos los enemigos de Dios y en ellos a mí, que soy el .conjunto de los mismos .. Dispuesta estoy para sufrir todo lo que V. R. crea con– vei;iiente que padezca para morir por completo a mí misma y comen– zar a vivir unicamente para gloria de Dios. Cuando guste, puede comenzar a cumplir con su misión de despojarme sin piedad ni reparo de esta piel de espíritu propio, de soberbia y pecado que tanto ha pido a mi Dios que me desnude para vestirme del espíritu de J esu– cristo y viv1r sólo e.n El. No tema, Padre mío, ser demasiado rígido conmigo, y mucho menos perjudicarme con los desprecios y humi– llaciones que tendrá la bondad de prodigarme, pues todo será nada para:' lo que yo merezco y deseo padecer en materia de humillaciones, las que no se.rán para mí sino otras tantas pruebas del infinito amor que Dios Nuestro Señor me. profesa. ¡ Y qué delicias tan puras pro– ducen en mi alma. los desprecios y humillaciones (aun aparentes) de las criaturas, máxi,me de mi Director, y también' del mismo Dios ! Y después .del acto heroico de caridad llevado a cabo el día primero def (1) El 15 de junio de 1910 los PP. Capuchinos de Castilla celebraron su capí– tulo provincial en el conYento de Bilbao para la ,elección de los nuevos superio– res. El P, Mariano de Vega cesaba en el oficio de Ministro Provincial, siendo destinado de comunidad a !León'. El día 23 del citado mes escribió a la M. Angeles desde Bilbao comunicándole •~stas noticias y anunciándole su viaje a Valladolid. Como ant,eriormente ,,había vislumbrado ya fos grandes vuelos y extraordinaria capacidad de aquella alma privilegiada, juzgó muy oportm)amente que el camino más seguro .para seguir acJelante en la vía comenzada era la humildad. De ahí que en su carta cargara algún tanto los. ,colores, escribiéndole, entre otras cosas, estas •enérgicas pa,labras, las cuales, al mismo tiempo ,que la humillaron profun– damente, fúeron 'fa llave mágica que franqueó las puerta~ de su corazón : «Bien puede V.· R. estar., tranquila, pues seguramente que vamos a· penetrar los profun– dos y eternos s~nos de la ruindad y malicia de Sor Soberbia ; pero ,conociéndola bi,en, lé proporcionaremos ,el antídoto conveniente pata serenar y engolfar en la inmensidad de Dios al átomo que se ha atrevido a levantar su cabeza contra el mismo Hacedor». El papelito que contenía estas palabras y algunas otras es el que la sien·a de Dios llevó por mucho tiempo en su seno.