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ZJO CORRESPONDENCIA DE LA M. ÁNGELES CON EL P. MARIANO No tengo tiempo para más. Ya sabe que cuento con sus bendi– ciones y absoluciones y con todos los actos que realiza a favor de Dios en su trato con El ; y que V. R. puede también disponer de los que yo realizo porque son suyos, pues lo soy toda yo y espero serlo eternamente. 4.-Tengo cierto escrúpulo o duda de si habré faltado a la,;ca– ridad en dar cuenta y poner en conocimiento de la comunidad las molesti~s que me ocasionó Sor N. por la dirección del confesor actual y sus intenrt:>s de procurar privarme ahora de la dirección de V. R., aunque no me he arrepentido ni me arrepiento de esta supuesta falta; antes bien, estoy muy contenta de haberlo puesto todo en conocimiento de la· comunidad parn que hagan las religio– sas lo que deben, y no por callar yo haga el demonio una de las suyas. Si acaso no estoy en lo cierto, esto es que estaba en deber de hablar, pues yo así lo creía, y por esto he faltado en descubrir las molestias causadas por Sor N ., absuélvame y pida al Señor que me perdone. Al Padre ya se lo he confesado repetidas veces .. Absuél– vame también de todos los pecados que he cometido desde que nací hasta este instante, en particular de los que juzga más graves ante Dios. Me arrepiento mucho de todos. He estado dos o tres días incompletos en cama; pero ya estoy bien. El baldamiento ha desaparecido; espero pasar tranquila y bien estos santos días. El Breve de confirmación ya ha venido de Roma. ·Las religiosas le saludan y hacen mil encargos, que 119 tengo tiempo para indicar. Su hija pecadora que le ama de todo corazón y pide su santa bendición, Sor Angeles.