BCCCAP00000000000000000000852

264 CORRESPONDENCIA ·DE LA J\L ÁNGELJ!S CON EL P. MARIANO • mucho, etc. Le pregunté si le había dicho el motivo del ca1_11bio, ,y me dijo que no. Le dije que no sabía si decírselo yo o no, pues me sen– tía inclinada a decir y a callar, á l;s dos cosas. '.Me dijo que le pare– cía que convenía que se lo dijera,, pues de lo contrario pensaría que había sido una ligereza mía. «No sólo pensará-le contesté yo--, sino que piensa ; per.o eso no me importa. nada) antes al contrario, por eso mismo me inclino a callar ; solamente me mueve a hablar mí deseo de tranquilizar a .la misma y ponerla en conocimiénto de la verdad.>> «No solamente-,-añadió el Padre-lo sabe Sor N ., sino al"– gunas monjitas más y entre ellas Sor N ., la cual vino aquí el día pasado cual riunca, y yo sencillamente hablando con ella se lo dije.». Esto tanibién lo sabía yo, pero al oír de labios del Padre me di9 una angustia mortaÍ; quedé corn:o si me hubíeran atravesado el alma con un puñal y me eché a llorar. «¡ Ay de 1:ní-dije'-'-y qué mal ha hecho usted decir a esa rel.igiosa con quién me dirijo!» Y después de más de tres años de silencio y reserva, le conté tocias, no toda~ pero sí muchas de las molestias y disgustos que dicha religiosa me ha .ocasionado por motivo de. la dirección es'piritual y trato con el mismo Padre, y rni temor de que ahora me arme 11uevos lazos para quitarme también a V .. R. y dejarme colgada entre el cielo y la tierra o clavada en una nueva cruz de sufrimientos interiores. Salí del confesonario .muy atribulada y llamé a Sor N. después de Completas y le conté todo, cógio 1:1e había vedado el Prelado comu"" nicar con el Padre en la carta que me escribió con mojivo de las quejas que le dió Sor N ., cuando fué nombrado confesor, los traba– jos (no todos) que he. sufrido hasta que me entregué a V. R. y mis temores de que ahora me armara el dempnio nuevos lazos por medio de Sor N. para privarme del bien que poseo en la dirección de V. R. Sor N., ante todo, me- pidió perdón de los malos juicios que estos días ha hecho de .mí por el cambio de la direGción, etc., y me ma– nifestó su sentimiento, de que haya dejado al Pad1'e por la compa– sión que éste le inspiraba por su gran cariño hacia mi alma, etc. .Me preguntó después si encontraba en V. R. lo que necesitaba y bus-,. caba en la dire('.;ción espiritual, y le dije que sí, que había encontrado y encontraba todo menos el entusiasmo, la alegría y gozo espiritual, que todavía no lo había hallado, pero qu.e lo atribuía a los trabajos interiores que he pasq.do desde qúe· me prohibió el Sr. Arzobispo

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz