BCCCAP00000000000000000000817

, , ' ' ' A.si r;_ne amaneció, d ije al piloto : . . . ' ,--Marcano, quisiera ver esa he.rida de la frente qµe, de seguro; estará. infectada, porque, amén de n.o ,hab~rtela podido lavar, la vendé, con un trapo sucio. ¿N_o , sient.es dolores? ,--'-Siento0cdolor, pero no ¡puedo precisarlo; es .generaren todo el cuerpo. L'e incorporo. Le miró antes la e:Spalda, y veo con gozo q'u'e las ·quemaduras presentaban buen aspecto. La crema mentolada habia sido un excelente remedio. Estaban sol– tando ya una .concha, debajo dé la cual · aparecia :la epi– dermis, delicada y fresca como la piel. de un nifio. Paso a la ' frente. ¡Oh, la frente estaba de miedo! Pa– ra contener la hefuorragfa, habííÚe· puesto un trapo ' que ' ' daba varias vueltas a la cabeza. La sangre había empa- pado todos los dobles y habíase secado formando un blo– que ,duro, ni ,más ni menos que si fuera un . ladrnio. ¡Y sin agua <para remojado! .. ; Cojo la ·venda por una ,pun-. ta y empiezo a tirar .con· sumo cuidado, Cada chasquido que . dab:a. ésta al desprenderse era un escolfrio,, agudo , que ¡me llegaqa hasta la mismísima punta de; lo¡¡ .pies. Marcano, apretaba las mandíbulas y agarraba, con los dedos , crispados pt¡fiados ,, .de .tierra; sufría horriblemen-, te .sin proferir una queja, con :valor inaudito. Yo no ,pu– de acabar; un desvanecimiento me hizo ir desplomado al suelo... Vuelvo en mí, y halló que Marcano, con entere– za increíble, lo había quitado todo por sí mismo. Pero· si la operación de despegue había sido tan re– pugilante, nd ' así la vist:icle la herida, la clii\:l estaba ro– sada/ 'limpia, sin ufü{iri:ota de putrefacción. ·· Arra.ncabá ttel límite f tonto--t>arletal derechc{ y térhi.inaba en la pfo- 257