BCCCAP00000000000000000000808

"El Viático es el sacramento del tránsito de la vida, función es– pecífica que ahora, en el Ritual, ha quedado más claramente subra– yada. La comunión en forma de Viático no se diferencia esencial– mente de otra participación en la Eucaristía, si bien, tal como se– ñala la fórmula del rito, marca la última etapa de la peregrinación que inició el cristiano en su bautismo. Es, pues, una circunstancia especialísima que será subrayada por el ministro haciendo ver al enfermo que, con esta comunión solemne, viene a completar un itinerario eucarístico comenzado el día de su primera comunión. Para que, por un lado, el Viático pueda expresar toda esta sig– nificación y, por otro, sea una aceptación consciente de la muerte como paso con Cristo a la Vida, el enfermo debe recibirlo en plena lucidez. Siempre que sea posible, el Viático debe recibirse dentro de la misa y esto, no sólo para dar posibilidad de recibir la comunión bajo las dos especies, sino, sobre todo, para hacer más clara y vi– sible la participación sacramental en el Misterio de Muerte y Resu– rrección de Cristo, que se renueva en la misa. Esta celebración pue– de tenerse en casa del enfermo. La profesión de fe sigue a las lecturas, supliendo incluso al Credo de la misa. Con esta profesión realizada en la cercanía de la muerte, el fiel aviva y actualiza la fe que recibió en el bautismo y la proclama ante la Iglesia". La cita es larga. Pero esto y todo lo que el ritual va indicando en sus letras rojas a través del rito de la comunión de enfermos, acentúan eso que dejó bien claro Cristo a los cafarnaítas: su vo– luntad de salvación. No vino para condenación, sino para salva– ción. Todo lo planificó para nuestra salvación. Lo que importa es que nosotros nos aprovechemos bien de esas "tablas de salvación", como se han llamado a los sacramen– tos. Y por eso la importancia de recibirlos lúcida y conscientemen– te.