BCCCAP00000000000000000000808

que en él morimos todos. Sto. Tomás dice, y esto es pura doctrina católica y teológica, que en el bautismo se nos aplican a nosotros los méritos de Cristo en la cruz como si nosotros mismos hubiéra– mos muerto. No es meramente que él haya muerto por nosotros, sino que nosotros morimos con él. San Pablo que a lo largo de sus cartas dice ciento sesenta y cuatro veces que "somos en Cristo"; inventa una serie de palabras intraducibles que vienen a decir que nosotros "con-padecimos con Cristo. "Con-morimos". Fuimos "con-sepultados" y "con-resu– citamos". Y seremos '""con-glorificados" con Cristo. Su muerte en la cruz nos libra a nosotros de dos muertes: la muerte del pecado y la muerte eterna que es consecuencia de la primera. Ambas muertes están vencidas por Cristo y por nosotros. Porque nosotros somos Cristo. Creo que esta doctrina debe tener unas consecuencias prácti– cas en nuestra vida. No meramente las consecuencias de que bau– tizados hemos sido incorporados a Cristo. De que tenemos la se– guridad del perdón y de la vida eterna. Sino en esta vida de cada día. Vivir con ese resplandor alegre de quienes saben que Cristo está con ellos y ellos con Cristo. Que son un solo cuerpo místico. Pienso que si eso no nos lleva a vivir una vida mejor, cristia– na, es porque no nos cabe en la cabeza que tanta hermosura pue– da ser verdad. Nos parecen afirmaciones que están encerradas como joyas de un valor incalculable en unas vitrinas a toda prueba y son para ser consideradas, admiradas, expuestas en alguna ocasión, pero no para ser vividas. Y justamente son para todo lo contrario. La revelación no es una instrucción, la proclamación por entregas de unas verdades, sino que es ante todo y sobre todo una vida, que nosotros tenemos que verificar en nuestra existencia. No sólo Cristo tiene que verifi– car en nosotros, sino que nosotros lo tenemos que hacer en Cris– to. Nosotros tenemos que vivir en Cristo. Morir ya hemos muerto. Resucitar gloriosamente resucitaremos. Ahora tenemos que vivir la vida cristiana que es raíz de la futura. Porque el cielo no será ni más ni menos que prolongación de esta tierra donde él y nosotros estamos tan unidos. Allí lo estaremos más. -193-

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz