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LXVI 26 septiembre 1911. SUMARio.-1. Me domina la pasión del ternor.-2. No puede continuar la cuenta. de conciencia.-3. Encargos. Gloria a Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo. M. R. P ..Mariano _de Vega. León. Mi muy venerado Padre en Cristo: Después del respetuoso y filial saludo debido a V. R., le ruego humildemente me bendiga. 1.-,.Es en mi poder su grata, fecha 23 de los corrientes. Desde la noche del 16, que terminé de escribir la confesión de las faltas cometidas desde que me conf!=sé con V. R., estoy tranquila, y más desde el recibo de su penúltima, y también libre de las su– gestiones malignas contra la dirección, y no sé qué cosas más que afligían sobremanera mi corazón y oprimían mi espíritu. Y es– toy también aliviada de la deshecha tormenta de temores, aun– que no siempre, porque me domina por completo la pasión del te– mor en todo. Temo a las criaturas todas, como si fueran otras tan– tas fieras; mejor dicho, a la malicia humana en ellas, máxime a ·1os hombres desde que oí leer en un libro intitulado Leyendas orien- tales, la historia de la fiereza de ciertos indios y paganos, y, sobre todo, de un Druso, que me parece fué en vida y continuará siendo en el infierno un acabado retrato del demonio. Temo, en segundo lugar, al demonio. ¡Qué miedo le tengo!, más todavía que por su malicia y por lo que puede y es, porque pienso que Dios Nuestro Señor, irritado por mis continuas faltas e infidelidades, me va a en– tregar en sus manos, no solamente para que me atormente, sí que