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CAR'I'A LXXllI,, _5 NOV!EMB 'R.ll 19n . cétera, etc., me pasan muchas veces-'-o me han pasado-; no sé si será una ilusión; lo que sé es que mi alma se cambia radicalmente con tales visitas, y queda tan unida a V. R. como retraída y alejada estaba antes; pues me parece que cayendo por tierra o desaparecien– do de mi alma ciertos muros que le impiden comunicarse con V. R. y rompiéndose todos los diques que detienen el cariño y confianza de la misma, se pone en comunicación íntima con V. R. en Dios enuna región de luz .enteramente distinta de aquella en que me parece exis.;. to cuando estoy retraída y lejos de V. R. Hoy también he tenido tristeza, miedos o no sé qué porque petl– saba escribir a V. R., corno si fuer'a a hacer un pecado. Suponiendo que sería cosa del enemigo, lo he rechazqdo. Se me olvidaba decir que no obstante mis ideas de que le perju– dico, etc., aJguna .que otra vez también pienso que le sirvo de con.:. suelo a V. R. Yo contesto que si, porque soy como el asna de Balaam y todo lo que V. R. me dice en aquella carta; y que así como aquélla no salió de la categoría de burra, tampoco yo, pues siempre seré burra ... Suya en Jesús, Sor Angeles. 5.-Pocos días después del 7 u 8 de septiembre, estando en la celda priora! una noche, serían las doce y media ·o una, me pareció que alguien me decía que aquella noche y en aquella misma hora se estaban cometiendo muchos pecados contra la santa pureza. Mas esta noticia producía en mí efectos muy distintos 9-e los -que me pro- · duce Dios, cuando me da a conocer los pecados del mundo; porque el espíritu que me indicaba lo dicho, se empeñaba en darme a co– nocer o hacerme comprender a mí la naturaleza de los pecados que me decía se estaban cometiendo. Lo cual no lo podía consentir, por– que no podía mi entendimiento fijarse-en aquello ni recibit. ninguna idea o especie de pecados de impureza ni comprenderlas tampoco; pues debo a la infinita bondad y misericordia de mi Dios: 1) El ha– berme conservado en una ignorancia absoluta de la naturaleza de tales pecados. 2) El haberme conservado siempre libre de tentado-