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UO éóRRllSPONDENCIA DE LA M, ANGllLES CON llL 1'. MARIANO comulgar y: oír Misa, y al volverme a Ja cama me acosté con el hábito; Ayer también estuve en cama hasta las tres y media o cua– tro de la tarde, que me levanté dos o tres horas. Todo el día estuve muy distraída, como siempre que estoy en cama, desde algún tiem– po a .esta parte, que lo paso tan disipada como antes recogida, hablando con todas las que vienen a verme, aun en hora de silencio, y dando más que hacer a las enfermeras que toda la Comunidad si estuviera enferma. Así que soy la causa de la relajación de la Comu~ nidad ... 4;~Pero no solamente pasé el día de ayer distraída, disipada, s.in hacer nada, sí que también combatida de las sugestiones del espíritu humano o maligno (no lo sé) contra la dirección espiritua,l, ab.orreciendo ésta y también el cargo de Abadesa, deseando verme libre de ambas cosas para quedarme sola, sola, con Dios, parecién– dome que estaría mejor, agradaría más a Dios, sería más feliz y tendría una muerte dichosa, lo que no espero siendo Abadesa y viviendo en la forma que vivo ... He aquí en qué empleé el día de ayer: en detestar mi vida pre– sente, la dirección, el i;argo de Abadesa, todo; y si no aborrecí a las religiosas fué porque no pude; en lo demás lo hubiera hecho, porque estoy muy cansada de todas y de todo el mundo en general, que me cuesta mucho vivir. Por la noche, en tiempo de silencio, hablé como el día antes con la M. Vicaria, enfermeras y Sor Natividad, a quien: mandé me leyera un poco en las cartas de Nuestro Seráfico Padre a todos .los fieles, etc., que me gustan mucho. El motivo de aborrecer la. dirección espiritual ayer y también hoy un rato no ha sido otro que parecerme que todo lo bueno que he comunicado a V. R. verbalmente y por escrito, así como el con– tenido del libro que V. R. tiene en su poder y del escrito que me manda dividir en capítulos, es todo mentira y que he ofendido y ofendo a mi Dios en hablar y escribir, y que éste es el mayor pecado que tengo, y .tan grave a los ojos de Dios, que mientras no retracte todo lo dicho, lo crea así V. R., me absuelva de los muchos e incalificables pecados de soberbia qúe en este sentido he cometido desde ql.Je comunico con V. R. (que son tantos como cosas buenas le he referido) y cambie de vida y conducta, o sea me quede sola con Dios, no se me perdonará ni tendré espíri 1 tu de Dios ...

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