BCCCAP00000000000000000000807

I04 COR.R.ESPONDENCIA DE LA M, ANGELES coi! EL· P. M/,R.IANO ¿ Y no. le da pena mortificarme a mí de esta manera? ¡ Dios mío, Dios mío, qué poca compasión tiene de mí! No sé cuántas veces he recorrido hoy i Jesús por consuelo, repitiendo: Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados que Yo os aliviaré (1). Bien véis, Dios mío, lo que estoy sufriendo-le decía-. Tan mala como estoy y mi Padré m~ obliga a escribir, sabiendo lo mucho que me cuesta. No tiene compasión de mí. Por vuestro amor y para vuestra gloria; sí, sólo por vuestra gloria y por vuestro amor hago este gran sacrificio, el mayor que podéis exigirme, pues me costaría menos morir que escribir, y morir no una, sino mil veces ... 8.-Día 7. Esta mañana en la oración me pareció que veía un muro de división que dividía mi vida desde mediados de julio atrás hasta el presente, cuyo muro no podía mi alma (ni quería) escalar para pasar a la parte opuesta, ni siquiera por brevísimo momento, ni ver lo que allí había, no obstante saber que había muchas cosas que en tiempos pasados constituían mi vida y mi felicidad. Pues qué-dije yo-, ¿acaso en esa pradera situada a la parte opuesta del muro, con la que me demuestra el Señor mi vida pasada, no hay nada bueno que recoger y más que en este lugar en que estoy? A esta pregunta: "Estoy mejor que nm ;i.ca- parecíame oír con– testar a mi alma-, estoy mejor que nunca". "¿Pues cómo es que yo no experimento-repuse-nada de eso que tú gozas, sino que me parece que tengo menos vida que nunca?" "Ya te dije el día pasR– do-me pareció que me decían-que tú no ves ni entiendes lo que 'pasa por ti hasta después .de haber pasado algún tiempo; si no, mira'\ Miré y vi y entendí tantas cosas, que por lo.mismo que fue– ron muchas no me quedó en la memoria ninguna, sino solamente las pruebas o señales que me dió para convencerme de que era ver.:. dad lo. que me decía, que fué: 1) no poder recordar acontecimien– tos pasados sin experimentar en mi alma angustias de muerte, sien– do así que antes del tiempo indicado vivía suspirando siempre por verme otra vez en los estados que ahora ni siquiera puedo recor– dar, porque me parecen no estados de gracia y gloria, como antes me parecían, sino de muerte; 2) la manera de manifestarse Dios (1) Matth., XI, 28.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz