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Cada cual proyecta su imagen UENTAN del escritor D. Miguel de Unamuno que al entrar en la universidad se encontró un día con su pr9pia imagen, un busto de piedra que le habían colocado en la entrada junto a la escalera. Dicen que dio la vuelta y nunca jamás volvió a pasar por allí. Comentó: -«Es tremendamente serio encontrarse frente a frente con uno mismo». Cada persona está proyectando día a día en su trato con los demás su propia imagen que, por otra parte, jamás es todos los días la misma, la per– feccionamos o la estropeamos. Cada uno tenemos del otro, de la otra, que tratamos, un retrato, una imagen, una fotocopia, que nos van transmitiendo con su comportamiento y que describimos cuando nos preguntan «cómo es fulanito». Es como una confesión pública continua que hacemos con palabras y con obras, lo mismo que el autorretrato que el pintor realiza con los colores. Pero el pintor no confiesa las propias debilidades en la pintura, en la vida nos confesamos todos en la imagen que proyectamos. Tal vez, deberíamos tener el atrevimiento, que Miguel de Unamuno no tuvo, de detenernos un rato cada día a analizar la imagen buena o mala que damos de nosotros mismos. Esta pausa se llama «autoexamen». 57