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Ponga oxígeno a su vida e UENTAN que Ramón y Cajal se enteró de que los estudiantes hacían apuestas, a pares y a nones, sobre cuántas veces decía el maestro en sus conferencias la expresión: «Sin em– bargo». Al final de una interesante conferencia dijo en clase: -«Sin embargo, sin embargo, sin embargo. Hoy ganan los pares». Una señora fue al médico y le preguntó qué podía hacer para evitar tener más hijos. -Muy sencillo, tome una taza de manzanilla de los Pirineos. -¿Es posible? -Seguro, señora. Encantada ella, y sonriente ella, quiso saber más. -¿La manzanilla hay que tomarla antes? -No, señora. -¿Después? -Tampoco, señora. -No lo entiendo, doctor. -Es muy fácil. Hay que tomarla «en lugar de... ». El juego es ascéticamente saludable, sin duda, pero no satisfactorio. La reflexión tiene gracia y la gracia es siempre saludal:tle... Cada día de nuestra vida ha de ir sazonado con una «miga» de sal de humor; de lo contrario no la vivimos como Dios manda, porque a serios nos ganan los bueyes. Y al hombre se le define como «animal risible». Ponga oxígeno a su vida. 34