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219 dos años antes, le impidió ir a Francia, le dejó en entera libertad de realizar esta nueva expedición. Algunos auto– res han pensado que Francisco, habiendo hallado en Hu– golino un verdadero protector, se sentía tranquilo en cuanto al porvenir de la Orden; debió efectivamente pen– sar en ello, pero la historia de los desórdenes que esta– llaron inmediatamente después de su partida, el sorpren– dente relato de la buena acogida que la corte de Roma hizo a algunos intrigantes que aprovecharon su ausencia. para hacer peligrar su obra, bastan para mostrar cómo la administración de la Iglesia se veía molesta con Fran– cisco, y con qué ardor deseaba la transformación de su obra. Luego haremos el relato detallado de estos hechos. Parece que un romañolo, el hermano Cristóbal, fué nombrado en ese mismo capítulo, provincial de Gascuña; vivió allí como Franciscano en la primera hora, traba– jando con sus manos, habitando una estrecha celda cons– truída con ramas y barro. Egidio partió para Túnez con muchos hermanos, pero les esperaba una gran decepción: los cristianos de aquel país, en el temor de ser comprometidos por el celo misio– nario de los Hermanos, los metieron en un barco, obli- gándolos a cruzar el mar. . Si la fecha de 1219 para estas dos misiones sólo reposa en conjeturas, no ocurre lo mismo para la partida de los hermanos que se dirigieron a España y a Marruecos. Cinco de ellos sufrieron el martirio, el 16 de enero de 1220. Se ha hallado recientemente el relato de sus últimas pre– dicaciones y de su fin trágico, por un testigo ocular. Ese documento es tanto más precioso cuanto que confirma las líneas generales de la narración mucho más larga hecha por barcos de Lisboa. No sería oportuno resumirlo aquí, porque no concierne, sino indirectamente, a la vida de San Francisco; pero es de hacer notar que esos acta tie– nen, además de su valor histórico, un alcance psicoló– gico, casi habría que decir patológico, verdaderamente no– table: jamás la locura del martirio ha sido mejor carac– terizada que en esas largas páginas en que se ve a los