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178 Es, sin duda, inútil recordar aquí ese hecho elemental que si, con el tiempo, las costumbres cambian, el hom– bre se modifica también singularmente. Si según la edu– cación y el género de vida, tal o cual sentido puede llegar a ser de una agudeza que confunde los hábitos corrien– tes -el oído en el músico, el tacto en el ciego, etcétera-, se puede apreciar por ello cómo ciertos sentidos. pudieron ser más agudos en otros tiempos que hoy. La ilusión fué, hace algunos siglos, en los adultos, lo. que es hoy en los niños de nuestros campos más atrasados. Una hoja que tiembla, una nada, un soplo, un ruido inexplicado, crea en ellos una imagen que ven y en cuya realidad creen absolutamente. El hombre es de una sola pieza; la hi– perestesia de la voluntad supone la de la sensibilidad; una es la condición de la otra, y es lo que hace a los hombres de las épocas revolucionarias mucho más gran– des que en los tiempos ordinarios. Sería inepto, so pre– texto de verdad, querer reducirlos a las medidas comunes de nuestras sociedades contemporáneas, porque fueron verdaderamente semidioses para el bien como para el mal. Las leyendas no son siempre absurdas. Los hombres de 1793 están aún cerca de nosotros, pero con todo de– recho la leyenda se ha apoderado de ellos, y es penoso ver a esos hombres, que diez veces por día tenían que tomar resoluciones en que todo estaba en juego, su suerte personal, la de sus ideas y a veces la de la patria, juz– gados como si fueran simples burgueses teniendo ocio para. discutir largamente cada mañana el traje que de– bían ponerse o el menú de su cena. La mayor parte del tiempo los historiadores no han visto en ellos más que una parte de la verdad; porque no hubo en ellos tan sólo dos hombres a la vez; fueron al mismo tiempo poetas, demagogos, profetas, tiranos, héroes, mártires. Escribir la historia es, pues, traducir y trasponer casi continua– mente. Los hombres del siglo XIII no pudieron resolverse a no relacionar con una causa exterior los movimientos interiores de su alma. En lo que nos parece como resul-

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