BCCCAP00000000000000000000784

99 Carlos Gil Arbiol REVISTA BÍBLICA   2019 / 1 2 de la Torá por la fe en Cristo, de modo que no existía más que la fe en Cris- to como condición para la alianza y la recepción de las promesas; los gen- tiles eran convocados en el tiempo final por Pablo a un Israel renovado por la fe en Jesús, donde los demás criterios quedaban suspendidos  25 . Por úl- timo, la perspectiva que subraya la comprensión de “Pablo dentro del ju- daísmo” defiende con rotundidad que Pablo no incorporó a los gentiles de ningún modo a Israel, sino que, como se esperaba para el final de los tiem- pos, los gentiles eran llamados a adorar a Yahvé “como gentiles”; por lo tanto, Israel permanecía inalterado y la misión de Pablo se comprende como el cumplimiento de esta esperanza escatológica  26 : Pablo congregó a los gentiles junto con los judíos sin modificar el judaísmo ni sus esperan- zas, sino confirmándolas  27 . Esta última corriente corrige, entre otras desviaciones, la idea que la nueva perspectiva tiene de la Torá como un marcador étnico excluyente o una exigencia caduca para los creyentes en Cristo, y afirma correctamente que Pablo no concibió la Torá como algo caduco o sin valor  28 . Sin embar- go, parece dar por supuesto que la esperanza escatológica de la llegada de gentiles a Jerusalén solo concebía que los paganos adoraran a Yahvé al fi- nal de los tiempos “como paganos”  29 ; pero los textos conservan una gran 25  Uno de los aspectos criticados de esta perspectiva es, precisamente, una cierta indefinición respecto a la incorporación de los gentiles: ¿son incorporados a Israel o a las promesas? ¿Se les considera en igualdad de condiciones que los is- raelitas o también israelitas? ¿Se les hace herederos de las promesas sin hacerlos miembros de Israel o se les incorpora al pueblo sin las exigencias que se pedían a los israelitas? La no circuncisión, ¿es signo de que no son judíos o de que lo son sin los requisitos previos? ¿Son considerados partícipes de la misma alianza de Yahvé con Abrahán y Moisés o de otra alianza que cambia los criterios de la ante- rior?; cf. D onaldson , “Paul within Judaism”, § 2. 26  Cf. H odge , “The question of identity”. 27  En bastantes aspectos, la perspectiva tradicional y la “radical” coinciden al defender la integridad de cristianismo o judaísmo frente a la otra religión; la nueva perspectiva es la que más se acerca al proyecto de Pablo de transformar el judaís- mo sin crear el cristianismo, si bien necesita, a mi juicio, incorporar algunos as- pectos de la perspectiva “radical”. 28  En Gal 3,24 (hōste ho nómos paidagōgòs h ē mōn gégonen eis Jristón, hína ek písteōs dikaiōthōmen), Pablo no dice que la Ley es pedagogo “hasta Cristo”, como traduce la BJ3, la CEE, la NBE, sino “hacia Cristo”, como traduce el LPD (Levoratti): “La Ley nos sirvió de guía para llevarnos a Cristo...” El valor de la Torá para Pablo queda claro en textos como Rom 3,1-2.31; 7,12; 9,4-5.30-33; 13,8, etc. 29  Algunos textos parecen sugerirlo; por ejemplo, Tob 13,11: “Brillará luz de lámparas por todos los confines de la tierra. Vendrán a ti de lejos pueblos numero- sos y los habitantes del confín del mundo, al nombre del Señor, tu Dios, llevando en

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz