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76 Ver, para el caSD de los esclavoS, el ámbito eclesial de su "libertad": "el que recibió la llamada del Señor siendo esclavo, es un liberto del Señor; igualmente, el que era nbre cuando recibió la llamada, es un esclavo de Cristo" (1 Ca 7,22}. 77 Sin embargo, esta hipotética conclusión no podrfa justificar una identificación de la ekklésia con las estructuras domésticas y patriarcales [lo que otorga una cierta ambigüedad a la ekklé· sla). Entre 105 autores recientes que niegan esta dimensión socio-polftica menciono la obra de S. KIM, Christ and Caesar: The Gospel and the Roman Empire In the Writings of Paul and Luke (Grand Rapids 2008) y la acertada recensión de W. CARTER, rec. SEYOON KIM, Christ and Caesar: The Gospel and the Roman Empire in the Writlngs of Paul and Luke: RBL 2009 Ihttp://www.bookreviews.org]. 78 Aunque con diferencias sustanciales, es la tesis que defiende J. OKLAND, Women In their Place: Paul and the Corinthian Diseourse of Gender and SanctuarySpaee (Edinburgh 2004). En el capítulo cinco (pp. 131-167) analiza las imágenes y metáforas que Pablo utiliza para lograr que las asambleas se separen de la vida diaria de la casa como un espacio sagrado ritualmen– te construido en 1 Ca 11-14. La ekklesía paulina es explorada como un espacio sagrado cons– truido através del ritual, con fronteras y un territorio ordenado con pleno sentido, una jerarquía diferente y un mapa diferente de modelos de roles del de fuera del santuario. 95 Parece que Pablo no consideró del mismo modo las tres anulaciones mencionadas en Ga 3,28; mientras que la primera (judío y griego) trascendió las fronteras de la ekklesia (cf. 1 Ca 8; 10 sobre las comidas con carne sacri– ficada), la segunda (esclavo y libre) y la tercera (varón y mujer) fueron limi– tadas al marco de la ekklésia 76 • Es posible que Pablo considerara que eran diferentes en sí o que viera los problemas sociales a los que se enfrentaba. Aunque algunos podrían afirmar que el evangelio de Pablo no tiene una di– mensión social y política 77 , yo creo más acertado concluir que Pablo intentó preservar escrupulosamente la ekklésia del todopoderoso e imperial impulso del modelo patriarcal de dominar todos los ámbitos sociales y políticos. Pablo quiso que lá ekklesia no fuese dominada por ese modelo y tomó medidas con– trovertidas, ambiguas y, quizá, arbitrarias, cuyo objetivo era que la identidad cristiana no se diluyera en el necesario diálogo con la cultura gregorromana 78 • Pablo percibió que las identidades de "creyente en Cristo" y "miembro de una casa/familia" eran potencialmente conflictivas; mantuvo la primacía de la pri– mera, pero' no las consideró jerárquicamente dependientes (la segunda sub– ordinada a la primera) sino pertenecientes a esferas diferentes (por eso en– tran en conflicto); en otras palabras, ser creyente, para Pablo, no equivalía a asumir la identidad del miembro de la casa que se es, sino que añadía una nueva identidad sociaL La ambigüedad de Pablo refleja su esfuerzo por ar- La evolución de la imagen del cuerpo en la tradición paulina