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156 REVISTA ESPAÑOLA DE TEOLOGIA.-E. Rivera de Ventosa de perfección es constitutivamente 'gracia y dones de Dios'. De esta suerte, al descenso de la agape divina responde el anhelo, la aspira– ción humana, el que pudiéramos llamar eros místico. De esta suerte, la altanera pretensión del eros platónico, en su intento de sacar de la mazmorra a los pobres encarcelados, se trueca en humilde servicio al plan de Dios que pide nuestra cooperación a su obra. La tercera instancia de la sacerdotisa Diótima, la más in– serta en el corazón de la paganía, puede ser también asimilada debi– damente por un profundo sentido cristiano. Como conclusión de este estudio nos parece conveniente y pro– gramático el hacer una breve referencia a la raíz de la incompren– sión protestante ante la utilización del platonismo por la mística católica. Esta raíz parece hallarse en su concepción de la natura corrupta por el pecado original. Este pesimismo sobre la naturaleza al ser ésta inficionada por el pecado original motiva su prevención contra los valores de la cultura humana. Cuando hace algunos años K.. Barth afirmaba insistentemente que la 'analogía entis' era el Anti– Cristo metido dentro de la teología católica, hacía eco a la misma mentalidad que A. Nygren, que ya conocemos. El primero desesti– maba la metafísica de Aristóteles ; el segundo, la metafísica de Pla– tón. En ambos casos, la condena de valores humanos filosóficos por creerlos vinculados a una natura corrupta. Manifiestamente el P. Angeles ha tomado otros caminos más se– renos y equilibrados. En contra de los protestantes, aún sin explí– cita referencia a ellos, reconoce la gran obra de Dios en el plano meramente natural e histórico. Pero la explanación de este gran tema daría para otro estudio. Quede anunciado aquí el proyecto. Baste ahora el haber planteado esta gran cuestión donde se dan la mano la teología y la filosofía con altos momentos de nuestra cul– tura. Y con ello hemos dado respuesta a la pregunta inicial de si el amor-eros ha sido un precursor o un concurrente del amor cris– tiano, tema que está pidiendo un ulterior desarrollo. RESUMEN La obra de A. Nigren Eros und Agape, sigue siendo un desafío al pensamiento católico, al acusar a éste de haberse dejado influen– ciar, 'paganizar', por el amor-eros platónico. Después de asumir del mismo Nygren su descripción del amor-eros y el amor-agape se ex– pone en un doble apartado el influjo del pensamiento platónico y cristiano en fray Juan de los Angeles, En el primer apartado se estudia el aspecto metafísico del pro– blema, es decir, cómo del bien fluye todo y a él retorna. Y se hace ver que los dos principios neoplatónicos bonum est diffusivum sui