BCCCAP00000000000000000000767
LA MISIÓN DEL CONGó 89 11.-Mandó otro día hacer reseña y se juntó casi toda la gente en la plaza mayor, y ,exhortó a todos que, pues que Dios les había favorecido tanto en enviarles tan apostólicos varones, que procurasien de enmendar sus vidas, viviendo católicamente y aprov,echándose de su santa doctrina, quitar las malas costumbr,es y aprender las buenas y virtuosas. Importó mucho esa exhortación y el rey la hizo con gran– de energía, porque era discreto y naturalmente elocuente. Pro·.teis:tó cómo había des,eado mucho v•enir a Roma a besar •e} pie a Su Santidad y a manifestar a los reyes y príncipes católicos la falsedad que a él y a todos sus vasallos les habían imputado de que ha):)ían admitido las herejías de los holandeses ,cuando se apo,d,eraron de Angola; acerca de lo cual s•e quejaba vivamente de ciertos portugueses residentes en su r,eino y ,en los circunvecinos, por causa del comercio, los cuales, decía, le habían sido siempre contrarios y mal' afectos por sus particu– lares intereses. 12.-El punto y honra de' príncipe católico le picó tanto, que quiso comprar un navío para v•enir a Roma personalmente, y lo hubiera eje– cutado, si d Prefecto no se lo hubiera impedido con gravísimas raz,o– nes. Aconsejóle que tuviese paciencia y que sacrificas,e a Dios su sen– timiento, pues ,en llegando a Roma los dos religiosos que volvieron a España, ellos informarían de la verdad a Su Santidad y a la Sacra Congr,egació11. y desvanecerían la mala voz ,esparcida y, como fieles testigos, ref<érirían las singulares muestras de Religión católica que habían visto y experimentado ,en Pinda y Soño. !Los manicongos sen– tían amargamente el desdoro que s•e había seguido a su nación, y aun la gente vulgar se quejaba agriamente de los portugues,es, y sucedió lo que ve1,emos adelante.
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz