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"Suplico a Vuestra Majestad -escribe- por el sacrosanto bap– tismo con que fue consagrado a Dios, entienda que no hay ni ha habido negocio más grande que éste ni más digno de Conci– lio General y que ninguna causa ha habido mayor ni más uni– versal ni más dificultosa, dignísima que toda la Iglesia de Dios se juntase a definirla. Congregue Vuestra Majestad prelados y varo– nes doctos, celosos de la salvación de las almas, para que con la autoridad y sosiego que tan gravísimo negocio pide, se trate y se determinen las verdades que en suma aquí porné". Las "verdades" del idealista y radical profeta franciscano esta– ban condenadas al fracaso, pues chocaban con unas realidades in– justas, si se quiere, pero irreversibles después de setenta años de his– toria. He aquí algunas de las propuestas del padre Maldonado, tan extremadamente revolucionarias, que no sabe uno cómo calificarlas, si de admirables o de ingenuas: "Aunque Vuestra Majestad tenga el derecho a las Indias, cada uno es señor de su hacienda. Por tanto, todas las tierras y pas– tos que con autoridad de Vuestra Majestad se han quitado a íos indios, está Vuestra Majestad obligado a restituirlas y cada espa– ñol obligado a restituir lo que tiene y ha llevado y habido de ellas, pues tiene hacienda ajena contra voluntad de su dueño... Restituyendo a los indios sus tierras... darán a Vuestra Majestad parte dellas que valoran, más todos los tributos, como tengo puesto en otro memorial". "Hasta que a los indios se les restituyan sus tierras y pastos, to– dos los tributos que se llevan son injustos y con obligación de restitución". "A los señores e hidalgos (indios) que les han quitado su honra y señoríos y hacienda, está Vuestra Majestad obligado en concien– cia a buscar medios cómo se restituyan y vivan en libertad y honra... ". "El modo que se tiene en el gobierno de las Indias es contra ley divina y natural". "Todas las encomiendas de los indios que por espacio de seten– ta años se tiene por experiencia que son causa de tanta destrui– ción del linaje humano sin haberse remediado, Vuestra Alteza está obligado a quitarlas o a poner remedio". Las reformas propuestas por Alonso Maldonado afectan tam– bién a puntos tan vitales .Y discutibles, como son los diezmos, las propiedades y dineros habidos por eclesiásticos en Indias, el siste– ma judicial, la distribución de las tierras, los llamados servicios per– sonales, etc. La reacción del orden establecido Como era de esperar, las denuncias y los proyectos del refor– mador franciscano irritaron los ánimos de los ministros y subalter- 260

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