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Actual fachada de la capilla de San Isilro, a11f.– g11a iglesia del Convento Capuchho. P. José de Villalba. Poco iba a durar esta ale– gría, ya menguada, porque el decreto expropiador del 1 ° de octubre de 1820 queda supri– mida la residencia capuchina de Villarrubia, quedando agre– gados sus frailes al de Calzada de Calatrava, que permanece– ría en pie por sumar de esta manera más de 24 religiosos ordenados "in sacris" (*), lími– te obligado para no suprimirse. Es el 31 de agosto de 1831 cuando el convento capuchino de Villarrubia de los Ojos queda realmente borrado del mapa de las casas religiosas de los Capuchinos de Castilla. El último en cerrar la puerta fue el En el interior de la iglesia del Convento de los Capuchinos quedaba la tumba de D. Jo3é Antonio Sánchez-Jijón Torres, funda– dor de la afamada ganadería ~ocal de los "toros jijones" (**). Caballero de Calatrava, había siéo enterrado allí en 1802, en el cen– tro de la iglesia, delante del altar mayor. En la Guerra Civil de 1936 la iglesia fue quemada y la tumba, profanada buscando imaginarios tesoros. Se hallaron dentro de elb un puñal y un escudo de la Orden de Calatrava. Cuando se arregló el suelo de la iglesia la lápida de la tumba se colocó junto a la pared a la derecha del altar, antes de la entrada de la Sacristía. A la antigua iglesia capuchina del "Corpus" hoy se la cono– ce como de "San Isidro". (*) Así se llaman a los que han recibidu los ministerios de diaconado, subdiaco– nado o sacerdocio. (**) htpp:/lwww.dipucr.esMllarrubiadelosojos/datos.htm. ■ por Elías Martín