BCCCAP00000000000000000000756

30 ElíAS MARTÍN EN SINTONÍA CON EL AMBIENTE Movidos por esta remodelación ambiental que se había hecho de toda la zona donde estaban enclavados los Capuchinos y conociendo que el viejo inmueble se– ría un sumidero de dinero para tenerlo medianamente acondicionado y conforta– ble, se vio que había que hacer algo nuevo. En estos últimos meses de 1957, se tienen los primeros contactos con el Ayun– tamiento para este asunto. Y, en noviembre, hubo reunión con el arquitecto del proyecto conventual, Don Luis Carlos Pombo. Todo camina con rapidez, pues, en enero de 1958, son aprobados los planos del convento e iglesia. «El Norte de Castilla» (de febrero de 1958) se hace eco de este momento y ha– ce ver, tras una reseña de la estancia de los Capuchinos en Valladolid, la razón que les asistía para establecer una nueva residencia. El derribo de la parte del convento que da a la calle Panaderos comienza el 5 de marzo de ese año, derribo realizado por el maestro de obras, Don Daniel Ca– pellán, que fue quien hizo otro tanto con la antigua Plaza del Campillo. El 3 de junio, comienzan a cavarse los cimientos de la nueva residencia de los religiosos, situada en la calle Panaderos. En octubre, el Ayuntamiento obliga a levantar otro piso más de lo que se es– tableció en el proyecto inicial. Habrían de ser tres pisos y el bajo. El 3 de octubre de 1959, la Comunidad Religiosa se traslada a las nuevas de– pendencias de calle Panaderos. El nuevo inmueble tiene comunicación con el an– tiguo. Y tiene planta baja donde están los recibidores y sacristía; en el primer pi– so, cocina, despensa y refectorio; segundo y tercer piso, habitaciones de religiosos. El 14 de marzo de 1960, se derriba la parte del convento que está afectada por la apertura de la nueva calle que se va a abrir por ese sitio. El encargado de tal trabajo es otra vez el Sr. Capellán, encargado por el propio Ayuntamiento. Y la nueva calle que se va a abrir llevará el nombre de «Divina Pastora», en honor a los Capuchinos que allí ejercen su ministerio y porque es una manera de correspon– der a su generosidad, ya que han cedido gratuitamente los terrenos por donde pa– sará la nueva calle.