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c<MARJI.N ATBA», j EL. SEÑOR VUELVE! todo -lo de los cielos y lo de la tierra- quede RE– ORDENADO o RESTAURADO en Cristo, bajo su jerarquía soberana».) -Por n:isteriosos designios del Padre, la obra restaurador,,, de Cristo habrá de llevarse a cabo por etapas. En wna 1.ª etapa, el Ungido (Cristo, Mesías) hace su aparición en el mundo, sin llamar demasiado la atención, para que sea más fácil el acceso a El. Se presenta a los hombres, en una tierra y pueblo de– terminados, como uno de ellos ... ; y entre ellos actúa, proclamando la Buena Nueva del Reino, poniendo las bases para que éste sea debidamente establecido ... En esta primera actuación, el Ungido de Dios tiene un estilo sin par de humildad, de mansedumbre, de inmolación por todos. Es, de verdad, lo que ya habían adelantado viejas profecías: el «Hijo del hombre», el «Siervo de Yahvéh», el «Ungido por el Espíritu» para llevar ánimos a los pobres y remedio a tantos agobiados e maltratados ... ; todo, sin agrias disputas ni gritos, sin mítines en las plazas, cuidando de no apagar la mecha todavía humeante, ni quebrar del todo la caña cascada ... (Le. 4, 16-21; Mat. 12, 17-21). Pero el final de todo aquello fue trágico: su protago– nista, Jesús de Nazaret, al que muy pocos reconocie– ron como el Cristo o Mesías, acabó en lo que parecía el fracaso total y definitivo: la muerte, por condena, en una cruz. - 89 -