BCCCAP00000000000000000000754

<:MARAN A'll'HA», ¡ EL SEÑOR VUELVE! do la reconcil:.ación con Dios -perdón de los peca– dos, reinado de la 'justicia'-, establece la paz, que es su natura~ :::onsecuencia; y con la paz, el desarme entre los hombres, la armonía en el reino animal, la fertilidad dEl suelo... La paz se extiende hasta él animal especialmente maldito, la serpiente, 'respon– sable' del primer pecado, y de todo lo que vino como consecuencia de él. La Era Mesiánica se describe aquí simbólica.mente como una vuelta a la paz para– disíaca». A este breve y acertado comentario no tengo nada que opcne:r; pe:ro si interpelar con una pre– gunta: Esa descripción de la Era del Mesías como una 'vuelta a la paz del Paraíso', ¿es tan sólo una des– cripción 'sim.bólica', o se trata más bien de lo que tal Era ha de ser en realidad? A mí me parece más en concordancia con el con– junto de enseñanzas bíblicas y creencias del pueblo :fiel, tener por una efectiva vuelta a lo del Paraíso (al estado primero que tuvieron seres y cosas) la obra de restaura-::!ión universal -«palingenesia»- que aún ha de llevar a cabo el Mesías < 1 >. (1) Me han asegurado, que en tiempo de las «aparicione8>> de Ga– rabandal, una de las videntes, Conchita, comentó: «Entonces noso– tros seremos como Adán y Eva antes de la caída». Desde luego, un conjunto de Lextos de los viejos profetas de Israel llevan a esto de hacernos pensar en un tiempo en que la 'situación de Pai·aíso' que co:-10cieron y perdieron nuestros primeros padxes, será -199 -