BCCCAP00000000000000000000754

EUSEBIO GARClA DE PESQUERA Esas explicaciones o interpretaciones 'cristianas' no han podido convencer demasiado a los rabinos ju– díos; pero es que también dejan insatisfechos a un número creciente de fieles hijos de la Iglesia. Estos encuentran tales explicaciones o interpretaciones de– masiado forzadas, como hechas para salir del paso, eludiendo dificultades, más que enderezadas de ver– dad a poner en claro el contenido auténtico de las pro– fecías. Seamos sinceros : no se ve cómo pueden darse por ya cumplidos en la persona y actuación de Jesús de Nazaret muchos de los textos que en las páginas de la Biblia hebrea aparecen indudablemente referidos al Mesías y sus tiempos ... Entonces, ¿qué? ¿Vamos a tener que resucitar, con angustia de incertidumbre, la vieja pregunta que de parte de Juan Bautista llevaron algunos de sus discípulos al mismo Jesús de Nazaret: «Eres tú el que había de venir; o aún debemos seguir esperando a Otro?» (Mt. 11, 3). No; nosotros no podemos preguntar de verdad eso. Nosotros sabemos que en Jesús de Nazaret tene– mos de verdad al Mesías tantas veces anunciado. Por eso le llamamos rotunda e inequívocamente Nuestro Señor Jesu-CRISTO. Entonces, frente a tantos vaticinios, inocultables, que parece que no se han cumplido en El, ¿qué hace- -18-

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz