BCCCAP00000000000000000000754
EUSEBIO GARCIA DE PESQUERA que, por el contrario, lo mantuvo; y pudiendo variar el curso de los acontecimientos, no lo hizo, y se so– metió al libre juego de las voluntades humanas; por tanto, con plena propiedad se puede decir, que vino a salvarnos entregándose; porque sabía que así ha– bía de suceder, como estaba dicho en las Escrituras, que, no obstante, también dan idea cabal de lo que habría sido su reino ... Por lo tanto, nada implica que diga que vino a morir por todos, pues debía probar que, como Dios, podía profetizar; otra prueba más de su divinidad. Si su Pasión y Muerte hubiesen sido decretadas por Dios Padre, nunca habría pedido en el Huerto que pasase el cáliz; si lo pidió, fue porque sabía que su muerte no era necesaria,· no obstante, acató lavo– luntad de Dios Padre, de dejar al hombre en plena libertad. La frase: « ¡Padre, perdónales, que no saben lo que hacen!», ¿libra de culpa al pueblo judío? Induda– blemente, no, puesto que en sí indica que éste hacía algo reprobable. Es decir, «no saben lo que hacen», no significa que ignorasen que El era el Mesías, pues– to que por tal le habían aclamado y habían visto y ex– perimentado las pruebas que había dado de serlo, con doctrina y milagros. Lo único que indica es que, a pesar de todo lo oído y visto, obedecieron antes a los pontífices que a El, sabiendo y creyendo, como sabían y creían, pues así lo demostraron el Domingo de Ra- - 168 -
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz