BCCCAP00000000000000000000754

CMAl'IA.N ATJll!All. ¡ ll<lL SEÑOR VUELVE! « Y yo me pregunto: ¿Es que Dios ha rechazado del todo a su pueblo? ¡De ningún modo!. .. Recordad lo de Elías, que se queja a Dios contra Israel: 'Ya ves, Señor, han dado muerte a tus profetas, han derriba~ do tus altares; sólo he quedado yo, y ahora acechan contra mi vida'. ¿Qué le responde el oráculo divino? -'Me hei reservado siete mil hombres, que nunca han doblado su rodilla ante falsos Baal'. Pues así también subsiste ahora un 'resto' de Israel, que responde a la gracia ... Los demás se endurecieron... » (Rm. 10, 1; 11, 1-10). -No va a ser para siempre: «También pregunto yo: ¿Es que han tropezado para quedar siempre caídos? ¡De ningún modo! Por su caída ha llegado la salvación a los gentiles, y esto debe despertE.r los celos de Israel. «Démonos cuenta: si la caída de este pueblo ha supuesto un enriquecimiento para el mundo en gene– ral, y su mer..gua una abundancia para los gentiles, ¿qué no traerá su plenitud... ? Porque, insisto, si su reprobación ha traído una :reconciliación del mundo con Dios, ¿q1:é no traerá su indulto y readmisión en la predilección divina? ¡Será como un pasar de muer– fo a vida!» (Rm. 11, 11-15). Después e.e tan espléndido anuncio, el Apóstol se extiende en consideraciones, cuya formulación no nos resulta a nos:,tros demasiado nítida ni precisa.. Pero - 113 -

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz