BCCCAP00000000000000000000753
TEMPORAS DE PRIMAVERA 129 n¿ Qué cosas eran esas que el joven Tito debía enseñar tan autoritariamente ? Las ,expresa muy poco antes el mismo Apósto[ : icSe ha manifestado la salvadora· GRACIA de Dios a todos los hombres, enseñándono.s a todos cómo debemos negarnos a la im– piedad y a las apei!encras mundanas, para vivir SOBRIA, JUSTA y PIADOSAMENTE en este siglo, siempre con la bienaveri– turada esperanza de que venga y se manifieste en toda su GLO– RIA el gran Dios y Salvador nuestro Jesucristo; el cual se entregó a Sí mismo por nosotros, para redimirnos de toda iniquidad y ad– quirirse así un pueblo propio que fuera celoso obrador de buenas obrasn {II, 11-15). »En este magnífico pasaje paulino se tmza para los creyentes un bien fundado programa de vida. Programa de vida que arran– ca de la primera venida del Hijo de Dios al mundo--venida en gracia y misericordia-, y ha de tener consumación en su venida segunda-cuando El vuelva en gloria y poder-. Primero, la GRACIA; después, la GLORIA; y en medio, un vivir sobria, justa y piadosamente. como El nos enseñó. »El tiene derecho a ,exigirnos mucho, por.que hizo por nos– otros al.go sencillamente tremendo: ,ccSe entregó a Sí mismo. por todos.,, Lo que este •«entregarse,, significó para El de trabajos Y dolores sólo podremos compr,enderlo ,en plenitud cuando nues– tra mente esté ya sublimada por la misma luz divina ; ahora nuestro deber ,es acercarnos humiildeme.nte cada dí'.a a una mejor inteli.gencia de: «misterio de Cristo>, con amoros,a lectura y me- ditaci6n de las páginas s,agradas. · ,,Y ¿ qué p::-etendí'.a el Dios-Hombre con su total entrega o sacrificio? «Redimirnos, primero, de toda iniquidad; y formarse, después, un ,pueblo propio, celoso obrador de buenas o.bras.» ,,P,er,o ni seremos largamente ~ii.bres de toda iniquidad ni po– dremos c•ontar::ios como per.tenecientes a la porción ,escogida, al ,pueblo auténticamente «•cristi.anoJ¡---,«,cristiano,> viene de Cris– to-, si no tratamos de ajustar en todo tiempo nuestro vivir a las normas que E-1 nos enseñ6 en su v,enida de misericordia-de «s,alvador.a gracia>,-Y ,que San Pablo ,condensa en tres vigorosas Hneas: 5 «Negarnos a la impiedad y a las ap,etencias mundanas. Vivir, sobria, justa y piadosamente en este siglo.
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz