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VI H:ACIA EL APOS'I'OLAIDlO De León a Sala.manca. -- Nuevo examen. El t.itu.alo de Predicador. - Primeros frutos de su apostoladlo. Aunque la carrera eclesiástica es bastante pro– longada, y los estudiantes reunan durante la :misma · gran acopio de conocimientos para ejercer digna:men• te los ministerios sacerdotales, deben, con todo, ampliar sus estudios mediante repaso de las asignaturas ya cursadas, y la consulta reposada de nuevos libros, que abran ancho horizonte a la capacidad intelectual de los Ministros del Santuario. Y para que a ningún sacerdote pueda echársele en cara lo que dice el Espíritu S_anto; "porque tu de– sechaste la ciencia, yo te desecharé a tí, para que no ejerzas mi sace~docio" (19); ordena, muy acertada– mente, el Código de Derecho Canónico, que todos los sacerdotes, aunque hayan obtenido un beneficio pa– rroquial q canonical, a no ser que por justas causas los dispense el Ordinario del lugar, terminado el curso de los estudios, sufran un ex~men, por tres años al menos, sobre las disciplinas de las ciencias sagradas, conforme a las normas que ha de prescribir el mismo Ordinario (20). (19). Oseas, IV, 6. (20). Canon 130, párrafo · '?

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