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El Vicariato de Caroní tendrá ahora los mismos límites que antes por el Este y Sur y por el Norte una línea imaginaria siguiendo el Paralelo 6º, hasta encontrar el río Caroní, que se remonta hasta su afluente · por margen izquierdo el río Pao y luego hacia el Oeste siguiendo por la división de, aguas entre los ríos Paragua y Caura hasta la frontera con Brasil. Con una superficie de 80.309 kilómetros cuadrados y alrededor de 40.000 habitantes. Al dejar las Parroquias, queda libre el personal en ellas empleado: unos irán al nuevo Vicariato de Tucupita y los otros se ubicarán en las dos casas existentes en la Gran Sabana: Santa Elena y Kavanayén. El Sr. Obispo y demás personal de Upata se trasladan a Santa Elena el día 3 de noviembre. Ka mara ta La región de Kamarata fue visitada por los PP. Nicolás de Cármenes y Ceferino de La Aldea el año 1.929, en vistas a situar allí algún Centro misional. Pero, al estar lejos de la frontera, no tenía la problemática que preocupaba al Gobierno nacional, y así no se realizó por entonces ninguna fundación. Sin embargo ya en los últimos años se venía preparando la fundación, que ahora, con el personal liberado, era fácil atender. De acuerdo el Vicario Apostólico, el Superior Regular y el de Kavanayén, determinaron que el centro se ubicaría en las inmediaciones del río Akanán y su afluente Ataperé. El P. Benigno de Fresnellino había proyectado levantar un Santuario a Ntra. Sra. de Coromoto en Kamarata. El año 53 empezaron los preparativos. En julio del 54 son destinados al incipiente Centro de Kamarata los PP. Lorenzo de San Pedro y Fidel de Respenda con el Hno. Saturnino de Villahibiera. Dejada la primera casita provisional empiezan por edificar una casa amplia y suficiente en un cerrito en la margen izquierda del riachuelo Ataperé: sus paredes son de adobe crudo, los pisos de cemento y el techo de zinc, igual que la capilla adosada al edificio. Poco después es destinado a Kamarata el P. Victor de Carbajal quien da mucho impulso al Centro. Hacia el año 62 empieza la construcción de los nuevos edificios de cemento armado, techo de ziné sobre madera bien labrada. Levanta un doble edificio: uno para los Misioneros y otro para las Hermanas Misioneras. Las 32