BCCCAP00000000000000000000749

CON PALABRAS DE LOS ORIGENES T ODOS sabemos del famoso dicho con que el príncipe Segismundo desahoga su amar– gura en la obra calderoniana «La vida es sueño»: «El delito mayor del hombre, es el haber nacido.» Un poco exagerado ... Para todos nosotros, el haber nacido es, sencillamente, el hecho funda– mental. Pero nos vino luego otro, que debe resul– tar decisivo: el haber nacido de nuevo -y preci– samente de Dios- por el bautismo. Nos hicie– ron así «cristianos»: quedamos configurados pa– ra siempre. En los actuales días de CONFUSION, de agita– dísimo embrollo dentro de la Iglesia, es de ur– gencia preguntarse por las notas que conforman o definen el auténtico «ser cristiano». Dicen que para esto hay que volver a las fuen– tes, a lo de la primera hora, porque luego, con el 104