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la obediencia a sus directitvas. El pasaje es importante también por la noticia de los estigmas. 1. Esta promesa, en sentido espiritual, está dirigi– da a los que obedecen los mandamientos de Dios y de sus padres espirituales. Ahora bien, el padre de nuestro espíritu ha sido Francisco, quien verdaderamente puede ser llamado con el nombre de Yonadab, hijo de Rekab. De hecho, Yonadab significa: "espontaneidad de Dios", y Rekab: "cuadriga" o también "subida". Y Francisco espontáneamente ha dado sobreabundantemente mu– chas cosas que no estaba obligado a dar sobre la base de los preceptos de la ley de Dios. El, con la cuadriga de los cuatro Evangelios y de las cuatro virtudes cardina– les, ascendió incansable de virtud en virtud, y tan lumi– nosamente siguió a Cristo crucificado, que a su muerte aparecieron en sus manos, pies y costado las señales de las heridas de Cristo. Y por esto sus hijos han crecido tanto en número en el mundo entero, que en ellos se ha verificado espiritualmente la palabra del Señor por me– dio de Jeremías: "Nunca faltarán descendientes de Yo– nadab, hijo de Rekab, que estén a mi servicio para siem– pre" (Jr 35,19). El orador continúa desauoHando cada uno de los preceptos en sentido espiritual y moral, después vuelve sobre ellos para hacer una aplicación literal: 2. Los rekabitas observaban aquellos preceptos se– gún su sentido literal, y asimismo ustedes, que son los descendientes de su padre Rekab, es decir del bienaven– turado Francisco. Y realmente ustedes no construyen casas, bien que otros las edifican para uso de ustedes, y en ellas habitan como huéspedes y custodios y no las poseen, sino que son propiedad de la Iglesia, en cuyo 248

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