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; .. ANT ECEDENTES HIS TOJ!UCOS . .. 43 consigo los ornamentos sagrados de la Santa Misa, dos cruces y un Crucifijo, que ponían en el altar cuando celebraban (60). Por noviembre de 1687 recibió el Cerro de los Totumos la visita del primer Capuchino, que, como llevamos dicho, no se sabe con cer– teza si fué el Padre Tomás de Lupián o el Padre Arcángel de Barcelo– na. Lo cier to es que ellos fundaron allí la primera Misión con su igle– sia respectiva, bajo la advocación ya dicha de "Nuestra Señora de Be– lén de los Totumos", _aunq-i:te Tavera Acosta se inclina a que fué fun– dada en 1692. Al morir el Padre Lupián en Mariguaca en 1688 y retir arse el :Pa– dre Basilio, quedó probablemente la nueva fundación abandonada, hasta que en 1692 llegaron los Padres Ambrosio, Prades y Valfogina. Pero nuevamen te se quedó sin Misioneros al morir el Padre Ambrosio y retirarse los otros dos, enfermos, a Trinidad en 1695. c).- "Sanla María Magdalena de Platanal" (1692).- Pocos datos po– seemos sobre esta fundación, la cual data de 1692 y fué llevada a cabo por los Padres Ambrosio de Mata:ro, Antonio de Prades e Ignacio de Valfogina, según vimos; aunque no es improbable que hubiera sido fun~ada en 1687, pues sabemos que para esa fecha habían sido esta– blecidas ya cuatro poblaciones, una de las cuales fué abandonada no mucho después por muerte del Padre Misionero; y como no nos consta cuáles fueran, se puede presumir que una de ellas fuera P latanal. En este caso lo que hicieron los nuevos Misioneros fué reanimarla y dedi– carle especiales cuidados. Ciertamente que fué creada antes de 1702, · fecha en que el Padre Anguiano escribió su Misión de la Trinidad y r.n la que da ya cuenta de ella ( (61). . Indudablemente que en 1695, al morir el ,Padre Ambrosio y r etirar– se .Jos Padres Prades y Valfogina, le tocaría la misma suerte que a Los Totumos: que·dar abandonadn, hastn que llegó la nueva expedición en 1717. El Padre Lodares dice que estaba esta Misión en la margen dere– ciia del Orinoco, enh'e la boca del Caroní y Santo Tomé de Guayana, a 12 leguas de esta ciudad y tierra adentro, y que tenía de 400 a 500 habitantes. Estos datos nos pueden servir para tratar de localizarla con aproximación. En efecto, algunos mapas nos hablan de un río "Plata– nal" o "Platanales", que nace en -la sierra lmataca, al este del pueblo de Altagracia y desagua en el río Upata, por su margen derecha, poco . ' (60) P. Caulin, obra cit., pgs. 167-68.-Rafael María Baralt, Histr. de Vene– :z,uela, pg. 255. Paris, 1841.- Tavera A costa,' Anales cits., pgs. 16 y 59.-Duaaite Level, ib., pg. 83. . (61) P. Rionegro, Relaciones cits., pgs. 215 y 221.-P. An,guiano, en Relacs. Históricas cits., pg. 100.- Duarte Leve!, pg. 143.- Tavera Acosta, ib., pgs. 81 y 96.