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278 VEINTICINCO AÑOS DE APOSTOLAT50 ·. ,; mera hora en que entró en proyecto su fundación; siempre ha servido un :frariciscano una de sus cátedras, ac tualmente la sirve •el Padr·e Bo– nifacfo de Olea, quien además tiene en su haber cultural, largos años de profesorado en el primer colegio franciscano de España y de ser Autor de la nombrada gramática del Dialecto guaraúno de los indios. Tierieh fundada también en la casa parroquial una r egular Biblioteca, que no deja de tener dos mil volúmenes. ' · · En cuanto a la labor religiosa, elÍ~· e~tiende su acción benéfica en el Delta, en la población indíg~na, 'diseminada en no menos de cua– renta mil kilómetros cuadrad.os. · Lugares que hace pocos años eran selva intrincada y brava, hoy tienen un prometedor asiento para la empresa civilizadora que con tanto afan han acometido; tal es la Casa-Misión con sus dependencias, internados y .cultivos, que ·se levantan en Araguaimujo; se introduce la cría de ganado formando un potrero; y se fomenta la cría de cochi– nos, gallinas y otras aves; y, tanto de día, como por la noche, bajo una nube apretada de zancudos, y a la luz de un farol, el Ca,puchino enseña a leer y escribir a todos aquellos a quien un destino providen– cial ha puesto bajo su cuidado; y empezarán los indios a alentar un más claro concepto de Patria, a dirigir sus actos por preceptos de mo– ralidad y orden, hasta ayer ignorados; y, en sus conciencias brillará una luz que les hará ver la Omnipotencia y la misericordia <lel Su– premo Hacedor. Cuenta ya diez y nueve años, que el respetable Padre Santos de A.belgas manejando un machete y acompañado por algunos indígenas, en1pezó, en un -día del Patriarca San José, a talar el lugar donde, em– pezando por fabricar una choza para un transitorio albergue, debía levantar.se la hoy Cuasi-Parroquia de la Divina Pastora de Araguai– mujo; y del mismo modo, una vez en el Barima, otra en San José de Amacuro, y por último en San Francisco <lel Guayo, y en toda la vas– ta extensión del Territorio, el misionero franciscano ha venido tra– bajando con tesón, -digno de encomio, por la incorporación del indí– gena a la vida civilizada. Considerad, por lo que tiene de portentoso, que el bárbaro de ayer sepa leer y escribir, y que suscriban, en todo Ara,guaimujo, en número mayor de cien parejas, las actas matrimo– niales; y sobre todo, que alimentan su a-Jma en esa fuente inagotable de consuelos, que nos de nuestra santa Religión. La continuación de obra .tan meritoria, a lo. largo de los años por venir, habrá culminado en algo grandioso para la Venezuela que surge, ya que ·el Delta es un vasto emporio de riqueza inex,plotada. Han fundado los respetables Padres Capuchinos de esta ciudad,

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