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:52 P. PIO M.ª DE MONDREGANES, O. F. M. CAfl. a Ti yo enderezo; y celebrando mi lengua tu grandeza, irá, como escribano, volteando la pluma con presteza (34). ARTICULO II El Corazón de Jesús es Corazón de Padre Entre los títulos más expresivos y que más nos con– .mueven se encuentra frecuentemente en la Biblia el nom– bre de Padre. Dios en nuestro dulce Padre celestial. Primeramente, es nuestro Creador, del cual recibimos todo cuanto tenemos en el cuerpo y en el alma. Lleva el título de Creador, Conservador y Provisor de todas las criaturas, especialmente de las racionales ... En los libros del Antiguo Testamento se presenta Dios, además, como un Padre amante del pueblo de Israel. Nos dice el Exodo: «Israel es mi hijo, mi primo– génito. Te digo, pues: Deja ir a mi hijo para que me sirva. Si rehusas dejarlo ir, mira que mataré a tu hijo primogénitoii (35). La comparación entre Dios y su hijo Israel y Faraón con el suyo es muy expresiva. «Cuando Israel era joven yo le amé y saqué fuera de Egipto a mi hijo» (36). Oseas habla en plural de los hijos: ((Sucederá que en (34) FRAY Lrns DE LEÓN, Los nombres de Cristo, lib. II, cap. IV. (35) Ex., 4, 22-23. (36) Os., 11, l.

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