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44 P. PIO M." DE MONDREGANES, O. F. M, CAP, sin mancha y sin arruga, unida al divino Esposo, Cristo. Esta unión o conexión se manifiesta en las palabras del himno de Vísperas: Ex Carde scisso Ecclesia Christo iugata nascitur; Hoc ostium arcae in latere est Genti ad salutem positum. La Iglesia procede del costado abierto de Jesús; de la herida, la sangre que redime y el agua que limpia. En la cruz Jesús y la Iglesia celebran sus desposorios. Reina hermosísima unida a Cristo, Príncipe del universo. El símbolo de ese nacimiento de la Iglesia del costado de Cristo es prefigurado en Eva, madre de todos los vi– vientes, que se formó de la costilla de Adán, que dormía. De semejante modo la Iglesia salió del costado de Cristo en la cruz donde yacía muerto (25). Los hombres con respecto a la Iglesia se pueden divi– dir en cuatro grupos. l. Hombres que pertenecen al cuerpo de la Iglesia y no al alma; son los bautizados que viven en pecado mortal. 2. Los que pertenecen al alma y no al cuerpo, los no bautizados que viven de buena fe y están unidos a Dios mediante la caridad. 3. Los que pertenecen al alma y al cuerpo, los bau– tizados que viven en gracia de Dios. 4. Otros que no pertenecen ni al cuerpo ni al alma son los infieles de mala fe o que viven en pecado mortal. (25) Cf. S. TROMP., SS. Cor. et Ecclesia, Corpus et Sponsa Salvatoris, en Cor lesu, t. I, págs. 248-152.