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HORNO ARDIENTE. DE CARIDAD 105 Rogad y pedid que Dios mande operarios a su viña, porque la mies es mucha y los operarios pocos; que se aumenten las vocaciones sacerdotales, religiosas y mi– sioneras, para que el reino del Sagrado Corazón se ex– tienda por todo el mundo. En otro lugar hablarnos de las consoladoras prome– sas que el divino Corazón hizo a Santa Margarita de Alacoque en favor de los apóstoles y propagandistas de esta especial devoción. La oración de los humildes penetrará los cielos, y del Sagrado Corazón descenderán torrentes de gracias y de misericordias sobre la humanidad delincuente. ¡ Oh Jesús!, haced que en la tierra se establezca vues– tro reino de gracia, de paz, de justicia y de amor. Rei– nad en los corazones de los individuos, en las familias y en la sociedad. Que vuestra sangre lave las manchas y pecados de todo el mundo, y conceda la vida eterna a todos los redimidos por ella. 2. Ap:>stolado de la palabra. Dicen los Proverbios: «La muerte y la vida están en poder de la lengua; cual sea el uso que de ella hagas, tal será el fruto» (24). La palabra es un medio eficacísirno de apostolado para el mal o para el bien. Los modos de ejercitar el apostolado de la palabra son muchísimos: confesando, aconsejando, predicando, conversando, enseñando a niños y adultos. Por medio de catequesis, de centros de enseñanza, de conferencias, de s::rmones, de instrucciones, de buenas palabras y de otras mil maneras por las cuales podernos y debemos comu– nicar las verdades, la fe, la sana doctrina y los conocí- (14) Prov., XVIII, 21.
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