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anunciará la trompeta la cesaczon del trabajo. El tiempo urge, y es necesario dar sepultura al ,cadáver. Refiere San Mateo: "Llegada la tarde vino un hombre rico de Arimatea, de nombre José, discípulo de Jesús. Se presentó a Pilato y Je pidió el cuerpo de Jesús. Pilato, entonces, ,ordenó que le fuese entregado. El, tomando el cuerpo, lo envolvió en una sábana limpia (l) y lo depositó en su propio sepulcro del todo nuevo, que había sido excavado en la peña, y ,corriendo una piedra grande a la puerta del se– pulcro (2) se fué. Estaban allí María Magdale– na y la otra María, sentadas frente al sepul:. ero" (3). San Lucas añade: "Era día de la Pa– .rasceve, y estaba para comenzar el sábado. Las .mujeres que habían venido con El de Galilea le siguieron y vieron el monumento y cómo fué .depositado su cuerpo. A la vuelta prepararon .aromas y mirra. Durante el sábado estuvieron .quietas por causa del precepto" (4). (1) La Santa Sábana (Síndone) conservada en Turín, ,que manifiesta impreso el Cuerpo de Jesús Crucificado. En– .tre médicos v peritos goza de verdadera autenticidad... (2) Las tumbas en el tiempo de Jesús se construían de -dos partes o vanos, El atrio o vestíbulo J donde se preparaba ,el cadáver para la seoultura, v la cámara mortuoria, donde ,se colocaba el cadáver. Se comunicaban con un paso estre– •cho. El atrio se comunicaba con el exterior por una puerta oue se cerraba con una grande piedra redonda, semejante .a una rueda de molino. Para abrir bastaba mover la grande ,piedra a derecha o izquierda... '~) Matt., XXVII, 59-61. (4) Luc., 23, 54-56. 292 -

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