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y una posesión total, sin esdavizar. Cuando, por circunstancias se une~ dos sere~ con diferencias tan ~randes, han de tener un tacto y una inteligencia exqu1sáta, algo así como un sexto sentido, para nP herirse. "Los esposos se amaban, pero con frecuencia no se en– ten.dfan. La contienda conyugal tuvo mucha:s veces por causa. mo– tivos religiosos, lo cual debió d,e hacerla particularmente agria; porque cuando Dios se interpone entrn un hombre y una mujer, el mismo amor, que todo lo allana, se convierte en una miseria las– timosa y, a veces, en úlcera enconada". Si a una misma fe unimos la piedad... Tanto mejoT. El slogan. dice: "Familia que reza unida, familia que vive unida". Es un:a ga– ra11tía grande de éxito. Porque ¿cómo se puede rezar un padrenues– tro sin perdonarse las diferencias 1:labidas durante el día y amar-– se más? Hay una conocida anécdota en la que una joven va a contarle a su párroco que ya tiene novio. Y que pronto tendrá que pensar en casarles. El párroco, que está sentado tras de la mesa la deja ha– bla:r. Y ella le dice: -Es múy guapo. 'El sace 1 rdote sobre una cuar– tilla escribe un cero. -Es muy rico. Otro ce ·o. -Es muy simpáti– co. Otro cero, -Me quiere mucho. Cero al canto. La joven ya esta– ba intrigada con tanto .cero. -Es muy honrado. Otro cero. --Proce– cede de una familia muy influyente y conocida de usted. Cero. Es... fulanito, el que usted conoc1e bien. A pesar de todo, cero. -Es... buen cristiano y piadoso. Entonces el pároco puso delante de tanto cero, un uno. Y el muchacho valía una millonada. El rostro de la chica resplandeció. Salió radiante de allí pensando ya en su boda. Eso de ser buen cristiano, de fe sólida, piadoso, no suele serr lo primero que se tiene en cuenta al escoger quien va a serr el compa– ñero o la compañera ideal, pero es lo más importante. El "Ritual Romano" tine una bendición para estos novios: "Señor todopoderoso, lleno de bondad, concede una mirada amorosa a es– tos quéddos novios, que se van a preparar a contraer el lazo sacra– mental del matrimonio. Dales las gracias de disponerse a este acto tan importante con sabiduría y piedad, como conviene a cristianos {flJle muy pronto se acercarán al altar para :recibir este sacramen– to. Que comprendan toda la grandeza y santidad de este compro– miso para vivir en el deseo de agradarte y cumplir juntos los de.. beres de este mundo. Que sean fieles y constantes en su amor, a fin de llegar un día a las alegrías d.el Paraíso, meta de la vida cristia– na. Que Dios todopoderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo, os ben– diga y os ayude siempre. Amén". 69