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91 d':élsde nuestro bautismo, el dia de nuestra rege– neración, de nuestra efectiva elevación. ¿Piensas tú con agradeci:miento en este día tan singular en que recibiste la vida de Cristo? San Vic,ente Ferrer cada año celebraba el ani– versario 1del bautismo. Luis IX, rey de Franc;ia, gustaba de firmar Luis de Poissy, agregando a su nombre el del lugar en que fué bautizado. En su sentir la vida sólo había empezado con la gracia s~ntificante. No temo más que una sola cosa -decía,-;: es ,el pecado mortal; sería la supr,esión de la vida recibida en Poissy, la única que me in– teresa (98). Cuenta· San Juan, que J.esús se entrevistó con lln magistrado de los judio.'3 Jlamado Nicodemo. ~ste vino a Jesús de noche y le dijo: «Rabí, sa– :>Emos que vienes de parte de Dios como maestro; ;,orque nadie puede hacer esas señales que tú 12,,c,es, si no es 1qu,e Dios ,estuviere con é[.» Res– Jondió Jesús y le dijo: «En verdad, ,en verdad te ligo: si uno no fuere ,engendra/do de nuevo, no JUede v,er ,e;r re:no de Dios.» Dtcele Nkodemo: :,¿,Gómo puede un hombre nacer, si ya es vi,ejo? ,,Acaso puede ,entrar segunda vez en el seno de :u madre y naicer?» Respondió Jesús: «,En ve11dad, m verdad te digo: Quien no naciere de agua y ~spíritu Santo no puede entrar en el reino de )k>s. Lo que nace 1de la carne, carne ,es; y lo que tace del iEsp:íritu, espíritu •es» (99). (98) C:f. M. M. ,AMoRr: Vive tu vida, p. 29' (Bar– elon:a, 195131).. (391) Joann., J;II, :N~.

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