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78 tajas, los beneficios, los sentimientos ... Dentro de los límites de la honestidad 'Y de la rectitud es una amistad buena. 2.ª Hay una amistad superior a la pr,ec,edente, o amistad cristiana, que se funda principalmen– te en motivos de fe. El Espíritu Santo dice que quien encuentra un a;rnigo encuentra un teso– ro (82). Se- ,conoce la amistad de David y de Jo– natán, de San Gregario y San Basilio, cuando es– tudiaban en Atenas; de Santo Tomás y de San Buenaventura; de Santa Teresa y de San Juan d-e la Cruz ... 3.ª Hay otra especie más superior y excelente aún y ,es la que se funda entre Jesús y el alma por la gracia. «Vos sois mis amigos, dice Jesús, si hacéis lo que os mando; si observáis los man– damientos, si vivís en gracia» (83). Cuántas veces nuestro corazón anda buscan– do un amigo, perfecto, desinteresado... Dios solo es nuestro :único amigo perfecto, que no nos en– gaña, en el que podemos confiar, a quien nos po– demos manifestar... Dice el autor de la Imita– ción: ¡ Oh Señor! ¡ Quién me dará de encon1irar solamente a V:os y de abrirte todo m:i corazón. Vos ien mí y yo -en Vos! (84). «Dilectus meus mihi et ego i}li» (8·5). De esta amistad idice el libro de la Sabiduríá: s:(La Sabiduría es para los hombr-es un tesoro in- (82) Eccl., 6,14. (813) Ioann., 15•,l\4!. (84) Imitación, !11,'le. (85) cant., TI, 1•6.