BCCCAP00000000000000000000733
15 tras miserias, nuestra nada ... ;Por esto, los q:ie poseen a:l Esiptr.i:tu Santo, difí.cilmente son orgu– llosos, saben distinguir bien lo que es de Dios y lo que es de la criatura; lo que pone la gracia y lo que coopera la natu11l,leza. El Espíritu Santo es calor.- ;Es el calor ,de ,1a devoción que dilata los corazones, ,es el fuego que ar,de y que dsvora y que hace idesapar,ecer todos los obstáculos. Sin ,este calor todo está fr:Lo, indifer,ente, sin vida y sin fervor. El Espíritu Santo ,es fortaleza.- Vence los im– pedimentos para la virtud, los enemigos del alma, las insidias del diablo, las concupiscencias de la carne, '1a violencia de las tentaciones. Este espí– ritu 1cüe fortaleza se manifiesta en los mártires, ,en los apóstoles, ,en los conf,esores y en las vírgenes y ,en todo hombre que ti,ende a la perf,ección de la vida cristiana, a la cual no se puede negar sin un esfuerzo consta!lte y vigoroso. II. COMUNICACIONES DIVINAS AL ALMA En la regeneraci:'.ln del alma por medio del bautismo y 1en la nueva vida sobrenatural que se adquier,e, se incluyen riquezas inmensas. La Bon– dad divina generosa;mente comunica sus dones al alma. Indicamos algunas de esas comunica– cionetS o donaciones de la Bondad Increada a la criatura redimida y regenerada.
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz