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COMENTARIOS RADIOFÓNICOS EN COPE-ASTORCrA Cafarnaún. Dos precisiones que van más allá del simple signifi– cado cronológico y geográfrco.El encarcelamiento de Juan prefi– gura lo que sucederá a Jesús: como muchos profetas y como Juan, también él padecerá el martirio. Al convertir a Cafarnaún, ciudad pagana, en centro de su predicación, Jesús rompe con las expecta– tivas mesiánicas judías, particularistas y nacionalistas, y se pre– senta como el Mesías universal que ofrece la salvación a todos los pueblos sin distinción. El episodio de la llamada de los primeros discípulos se sitúa junto al lago de Galilea, donde los hombres están entregados a su trabajo diario. La llamada de Dios llega al hombre en las.tareas cotidianas, en el en torno normal y habitual de su trabajo. El hombre es llamado a compartir el camino del Maestro con una sencilla palabra: "Seguidme". Y la respuesta generosa debe realizarse en la adhesión plena y total: "ellos al ins– tante, dejando las redes, lo siguieron". La iniciativa es siempre de Jesús: el discípulo es llamado fundamentalmente para participar del destino de Jesús. Este seguimiento exige una profunda trans– formación, una generosidad sin límites. Es decir, ante las exigen– cias de la llamada se desprenden de todo aquello que da seguri - dad y enraíza estérilmente al hombre. Pero el seguimiento no instala a los discípulos en un jardín de delicias, en un estado de privilegio, sino en un estado de servicio permanente a los herma– nos: "Seguidme y os haré pescadores de hombres". Los discípulos tienen necesariamente que participar en la tarea redentora y libe– radora del Maestro. El punto de mira del verdadero seguimiento es siempre el hermano. Un rabino judío pregunta a sus alumnos en qué se puede reconocer el momento en que la noche acaba y comienza el día: -¿Cuando se puede distinguir una palmera de una higuera? -No, respondió el rabino. -¿Cuando se puede distinguir fácilmente de lejos un perro de un cordero? 35

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