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COMENTARIOS RADIOFÓNICOS EN COPE-ASTORCrA reada justicia social. Jesús pide y exige amor. Las formas concre– tas, tanto individuales como sociales, institucionales y estructura– les de encarnar el amor pueden variar en cada época y en cada cul– tura. Pero siempre el amor, además de socorrer las necesidades más inmediatas e inaplazables del ser humano, ha de ser subver– sivo de las estructuras injustas, debe promover la equidad y la justa distribución de las riquezas de la tierra. El amor cristiano ha de ser la fuerza que transforme estructuras y centros de poder, ins– tituciones y planes económicos. Para un cristiano la cima de la justicia es el amor. Séptimo domingo de Pascua. La Ascensión del Señor (Me 16, 15-20) La fiesta de la Ascensión que celebramos este séptimo domingo de Pascua, nos habla de esperanza, de alegría y de luz. Nos dice la fiesta que Cristo ha resucitado, ha terminado su ciclo terrestre y ahora vive para siempre junto a Dios. Aunque Cristo desaparece del horizonte terrestre, sus discípulos saben que él sigue con ellos. Se perpetúa a través de la historia en la acción misionera de sus seguidores y en la presencia activa y fecunda de su Espíritu: "Id por el mundo entero y proclamad el evangelio a toda la creación. Ellos fueron y proclamaron el evangelio por todas partes, y el Señor actuaba con ellos" Los discípulos se dis– persan por los caminos del mundo para anunciar la alegre noticia: Cristo ha resucitado, por eso sigue presente en medio de nosotros transformando e iluminando nuestras vidas. Con la resurrección de Cristo todo se explica, el universo ya no es lo que fue, la natu– raleza recibe otro sentido, los hombres, nosotros, ya no seremos nunca lo que fuimos. Si la muerte aparece como un enigma inoportuno que intenta privar la existencia humana de sentido, la resurrección de Cristo se presenta como el acontecimiento único, 131

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