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COMENTARIOS RADIOFÓN COSEN COPE-ASTORCi-A bra no siempre será agradable; será, por el contrario, una palabra exigente, clara y contundente, que exigirá un cambio de vida para vivir con talante distinto, para ver con nuevos ojos, para oír con oídos nuevos. Los hombres estamos constantemente tentados de acomodar el evangelio a nuestros caprichos personales, a hacerle decir a Jesús lo que nos conviene para vivir una religión desvir– tuada y desnaturalizada. El anciano Simeón no excluye a María la madre de Jesús de vivir esta hora de contradicción: "Una espada te atravesará el alma". María, como madre de Jesús y como símbolo de la comunidad creyente, no tendrá todo resuelto. Muchas cosas que Jesús dirá y hará serán motivo de escándalo y el mismo trance de la cruz será de difícil digestión. Pero ella, siempre reflexiva y atenta a la palabra de Dios, se convertirá en modelo radiante y confortante del verdadero creyente. En esta hora de acoso organi– zado a la institución familiar, de prescripciones y campañas absur– das y trasnochadas, permanezcamos firmes en nuestra fe e incon– movibles en nuestros principios porque al final se cumplirá la profecía del anciano Simeón. Segundo domingo de Navidad (Jn 1, 1-18) El nacimiento de Jesús aparece en los evangelios como un acontecimiento cercano y familiar. Es la única fiesta en la que las familias transforman sus casas en pequeños templos con las imá– genes variopintas del Belén, del árbol adornado de luces multico– lores, con los villancicos alegres y sencillos. Todo esto se apoya en una escenografía plástica con que los evangelios transmiten los distintos momentos de la aparición del misterio: encuentro de María con Isabel, el pesebre, la escena de los pastores ... También en estas escenas hay una profunda teología. Pero es el evangelista Juan, en su himno introductorio al evangelio, quien de modo fas– cinante y estremecedor nos describe el sentido del nacimiento de 103

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