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b) interpretación "maximalista" Los cambios han de ser profundos y urgentes em– pezando desde la religión que hay que "desmitificar". Si se pregunta por el ámbito y la extensión de los cam– bios hay que responder sencillamente: debe cambiar– se todo. -La teología clásíca no responde, ni en su punto de partida ni en sus formulaciones a los proble– mas y aspiraciones de los hombres de nuestro tiempo. El nuevo quehacer teológico tiene que te– ner en cuenta al hombre actual y no perderse en las nubes. No sólo debe cambiar el lenguaje, que obedece a culturas pretéritas. Debe cambiar el mismo enfoque tradicional de la teología para "iluminar" la realidad del hombre. En esta "nueva" teología de "encarnación" lo de– cisivo es el hombre al que hay que "liberar" de to– da clase de alienaciones y opresiones. La teología de la "liberación" es -y no puede ser de otro mo– do-, eminentemente "antropocéntrica". -El "pluralismo teológico" es, desde esta perspec– tiva, una necesidad insoslayable. No sólo hay que desmitificar la religión de todas las adherencias con que se ha obscurecido su imagen a través de la historia. Es que hay que desmitificar la figura del mismo Dios, ofreciendo el rostro que nos da la Biblia para rescatarlo así de toda acomodación burguesa. -El cristianismo "institucional" tiene que dejar pa– so a un estilo "carismático" donde se realice ple– namente el hombre como creyente y como ciuda– dano. Las estructuras han restado vigor, libertad y contundencia al mensaje cristiano. 47