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El Ma DOCTRINA PROTESTANTE El matrimonio no es un sacra– mento instituí– do por J esucris– to. No consta en el Nuevo Testa– mento que el matrimonio sea indisoluble. SEGUNDA PARTE " " mon10 el Divorcio LA BIBLIA 1) "El rnarido es la cabeza de la mujer, corno Cristo es la cabeza de la Iglesia... De donde, así corno let Iglesia está sujeta a Cristo, las muje– res han de estar sujetas a sus maridos en todo. Mariclos, amad a vuestras esposas como Cristo amó a .la Iglesia y se entregó a Sí mismo vor ella para santificarla, después de haberla purificado en el agua bautismal, por la palabra, a fin de hacerla comparecer delante de El, gloriosa, sin mancha, ni arruga, ni cosa semejante, sino santa e inmaculada... ESTE MISTERIO ES GRANDE; MAS YO LO DIGO CON RELACION A CRIS– TO Y A LA IGLESIA" (Carta de San Pablo a los Efesios, V, 23-32). Consecuencia.-El Sacramento del matrimo– nio se halla insinuado en este texto, como ob– serva el Concilio ele Trento (Sesión XXIV). Se• gún San Pablo, el matrimonio es un gran miste– rio que simboliza la unión de Cristo y de su Igle– sia; luego produce la gracia significada por este misterio. En efecto, si el matrimonio cristiano impone a los esposos obligaciones sobrenatura– les (sumisión y amor modelados sobre Cristo y su Iglesia), es menester que confiera a los con– trayentes una gracia sobrenatural proporciona– da a dichas obligaciones. El matrimonio, pues, es un sacramento, es decir, un signo sensible de la gracia invisible que Dios concede a los que se casan para que puedan cumplir fielmente las obligaciones de su nuevo estado. 2) "LO QUE DIOS UNIO, EL HOMBRE NO LO SEPARE... Cualquiera qite repudia a su mu– jer y se casa con otra, comete un adulterio res– pecto a la primera. Y si la miljer repudia a su marido y se casa con otro, se hace adúltera" (San Marcos, X, 9-12). 3) "Cualquiera que despide a su mujer y se