BCCCAP00000000000000000000719

causfos y sacrificios por el pecado no fe agradaron; enfonces dij-e: Héroe aquL presente; en el l:omo del libro ss:tá escri:to_ de: mí; quiero hacer, ¡oh· Dios!, :tu voluntad". . -~ Diciendo. más arriba: "Sacrificios, y ofrendas" y "holoc~usícs y sa- crificios pór el pecad? no los (!Uisis:te ni :te a,:n:adaroft". los que según la ley se ofrecen, entonces ha dicho: "Hérne aq:uí r2:ue vengo a hacer :tu vo,luniad". Supr,ime lo primero !)ara esl:abiecer lo se• gurtdo. En virtud de la cual "volunl:ad" hemos sido santificados me– diante lá "oblación del cuerpo" de Jesucris.to de una vez para siempre. (Heb 10,5-10) Cristo anula los sacrificios del A. ·Testamento que resultaban insufi– cientes estableciendo como único valedero la oblación de sú cuerpo en obediencia al Padre. La obediencia, por consiguiente, está en la raíz de su sacrificio; es· su cal,lsa y explicacióIJ., en conformidad con la sentencia de I Sam. 15,22: ·'Más quiere Dios la obediencia que las víctimas". El cual en los días de su carne, habiendo ofrecido. ple.garias y sú– plicas, con poderoso clamor y lágrimas al que le podía salvar de la muer:l:e, y habiendo escuchado por razón de su reverencia au,n ,con ser Hijo, aprendió de las cosas que padeció lo (!Ue era obe.. diencia; y consumado, vino a ser para todos los. (!Ue le obedecen causa de salud eiei·na, proclamado ~or Dios sumo sacerdoia s.9- gún el orden de Melquisedec. (Heb, 5,7-10) "APRENDIO OBEDIENCIA" (v. 8): conoció práctica y experimentaí– mente lo que era obedecer, lo que cuesta la perfecta obediencia hasta la muerte y muerte de cruz. CONSUMADO (v. 9): Cristo, al s'2r inmolado alcanzó la consumac10n de su condición de víctima: consumación que fue para El principio cb su glorificación y para nosotros causa de salud eterna. (13) Y adelantándose un poco ca"!Ó sobre su rostro "! oraba diciendo: --Padre mío, si es posible, pase de mí esfe cáliz; mas no como yo quiero, sino como quieres tú. (Mf 26,39 y parl.) b) en forma humillante y doloros2: «kénosis• sacrificial El modo concreto de verificarse este sacrificio de obediencia de Cristo al Padre ha sido en el dolor y humildad más incomprensible de la his– toria. "Precisamente Jes-ús crucificado es el "obediente por excelencia", entregado al servicio del Padre en la más honda humillación, en la ( 13) BovER. o. c. . comentario a Heb. 5, 8-9 20-

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz