BCCCAP00000000000000000000714

EL APOSTOLADO FRANCISCANO 347 oras sencillas instruyeran a sus sacerdotes subordinados en el símbolo de la fe, para que así fueran capaces de explicarlo a los fieles ( 1 º 1 ). Ni faltaban tampoco obispos que carecían de los necesarios conoci– mientos para predicar ( 1 º 2 ). En vista de este mal estado de cosas el cuarto Concilio de Letrán en 1215 orden6 a todos los Obispos, amenazándoles con severísimas penas, que colocaran en todas partes excelentes predicadores ambu– lantes que fueran de parroquia en parroquia anunciando la palabra de Dios y administrando el sacramento de la Penitencia ( 1 º 3 ). Las dos órdenes mendicantes que habían sido fundadas expresamente con miras a la predicación ambulante, debían tomar sobre sí la ?arte principal de esta misión. Los dominicos, como eran orden clericd, se dedicaron ya desde el principio a la predicación dogmática. Les Franciscanos la inauguraron tan pronto como tuvieron suficiente número de per– sonas bien instruídas. De hecho Honorio III ya en 1218 y por cierto en el primer escrito de recomendación que expidió para los Frailes Menores, dirigido a los Obispos, habla no ya sólo de la predicación de penitencia, sino que dice sencillamente que los Frailes Menores "siembran la semilla de la palabra divina a ejemplo de los Apóstoles" ( 1 º 4 ). Poco después se refiere que San Antonio de Padua (desde 1222) no sólo había como un nuevo Evangelista predicado a los fieles en muchas comarcas sino también había convencido a muchos herejes en públicas disputas y los había convertido en tropel ( 1 º 5 ); que había infligido tales golpes a (101) RicHARDI PooRE, Const. ibíd. (102) Véase el decreto del IV Concilio de Letrán, que citamos a continua– ción. (103) "Unde cum contingat, quod episcopi propter occupationes multipli– ces, vel invaletudines corporales, aut hostiles incursus, seu occupationes alias: (ne dicamus defectum scientiae, quod in eis est reprobandum omnino, nec de cetero tolerandum): per seipsos non sufficiunt ministrae populo verbum Dei, maxime per amplas dioceses et diffusas: generali constitutione sancimus, ut cpiscopi viros idoncos ad sanctae praedicationis officium salubriter cxsequen– dum assumant, potentes in opere et sermone, qui plebes sibi commissas, vice ipsorum, cum per se idem nequiverint, sollicite visitantes, eas verbo aedificent et exemplo ... Unde praecipimus tan in cathedralibus quam in aliis conventua– libus ecclesiis viros idoneos ordinari, quos episcopi possint coadiutores et coope– ratores habere, non solum in praedicationis officio, verum etiam in audiendis confessionibus et poenitentiis iniungendis ac ceteris, quae ad salutem pertinent animarum ... " Concil. Later., IV, cap. 10, en HARDUIN, VII, 27. ( 1 04) " ... screndo semina verbi Dei apostolorum exemplo diversas circum- cunt mansiones." Bula Cum dilecti de 11 de junio de 1219, Bullar. francisc., I, p. 2, n. 2. (105) " ... in tantum praedicationis opus explere studuit, ut nomen evange– listae gestorum strenuitate compensaret... quum multos haeretica cerneret pravitate delusos. . . versuta haereticorum dogmata sole lucidius confutavit. Ita

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz